Si bien el técnico visitante Santiago Castillejo reconocía con la boca pequeña que el resultado no había sido justo, «aunque yo la única justicia en el fútbol que conozco son los goles», al local, Asier Garitano, se le notaba tocado, «el gol del empate en el descuento nos ha hecho mucho daño pero debemos levantarnos e ir a entrenar con una media sonrisa, pues ha habido cosas que hemos hecho muy bien. Hemos tenido actitud, ocasiones, creo que hasta buen juego, pero nos ha sido imposible sentenciar el partido con el 2-0 y lo hemos acabado pagando de forma dolorosa». El técnico recordaba en dos ocasiones en la rueda de prensa que «le reclamaba al juez de línea que la falta era ya fuera del tiempo dado para la prolongación. El miércoles ante el Prat no nos dejaron sacar un córner justo por ese motivo».

Garitano era una vez más sincero al asegurar que «lógicamente nos gusta más vernos cuartos en play-off que no quintos y mejor todavía terceros o primeros, pero solo podemos seguir trabajando como hasta ahora y pensar solo en el siguiente partido, que es en campo de un hueso como el Sant Andreu el domingo por la tarde. Se está viendo que todos los equipos lo tienen difícil para ganar partidos y más para encadenar una buena racha de victorias por lo que debemos ver que seguimos muy cerca de la cabeza y creo que entre estos cinco equipos se decidirá todo. No estamos teniendo el componente suerte en los últimos choques, ante el Levante B caíamos con un penalti también in-extremis.Ahora lo veemos todo negro pero mañana será mejor. Debemos acudir a entrenar con una media sonrisa y corregir esos errores en el tramo final decisivo». El técnico vasco no se quejaba por la escasa aportación de los jugadores del mercado de invierno.

El capitán y autor del gol, Devesa, a su vez transmitía la tristeza que se vivía en el vestuario «en ningún momento pensábamos que el Reus nos podría inquietar pues en la segunda parte no habían rematado entre los tres palos. Sin embargo, llegó esa jugada final fatídica y vimos como volaban dos puntos en el último suspiro». El lateral ibense pese a ello transmitía un mensaje a la afición, «les pedimos que confien en nosotros, somos un vestuario muy unido, en buena sintonía, que trabajamos muy bien y que seguro nos emplearemos al 200% los partidos o finales que nos quedan».